He conocido un alma nueva, y me hice adicta a su melancolía, a sus canciones mezcladas con las mias... hay algo curioso en su mirada, sobre todo en la mas despierta, clara como la madrugada, gracias a ella entendi que me enamoro mas de los instantes que de las historias...quizas por que los finales son mas inmediatos y misericordiosos, dejan un sabor fresco, y en lo mejor de su ciclo...se despiden, como queriendo dejar un buen recuerdo.
Y simplemente estará en mis melodias...voy a dejarlo danzar en mi almohada algunas noches a cualquier ritmo que el elija, y si me quedo despierta lo suficiente quizas lo vea y me invite a danzar junto con el o compartamos una cerveza...una guitarra, y nos quedemos colgados en la nada.
Se que de pronto llegará a disiparse el recuerdo y el remolino de sensaciones de ese roce perfecto...pero siempre tendremos esa tarde de mayo y a Drexler tocando solo para nosotros...por que he conocido un alma vieja...y hoy soy adicta a su melancolía...
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